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19/3/18

Editors: Violence

Editors
Violence
PIAS Records
09/Mar/2018


"Misma edición, aparente violencia"

No hay que llegar primero, pero hay que saber llegar, y más difícil aún, mantenerse. Esa es la historia de muchas bandas del milenio actual, y es necesario decirlo porque específicamente es el caso de Editors. Porque sí, llegaron esos nombres que trazaron el camino a seguir en los 2000s donde por supuesto, estuvo Interpol, quienes liberaron una de esas nombradas obras maestras en 2002; tiempo después Editors, que sin llegar a ese estatus, con The Back Room hicieron gala de un Post-Punk más dinámico y vertiginoso, más enfocado al hit pero de gran manera. El problema vino inmediatamente después, cuando de hacer un disco plagado de canciones impecables y directas, la materia prima, la idea, comenzó a escasear para dejar la cuota cada vez más corta. La tan mal etiquetada evolución de un In This Light And On This Evening que más fue un refugio en Synths y bases electrónicas, fue el punto de quiebre donde cambiaron sus raíces a cambio de alcanzar compendios medianos con 2 o 3 temas que valieran todo; por supuesto que también lo digo por The Weight Of Your Love. Desde entonces las cosas no han sido diferentes con un In Dream que corrió a buscar idea en los 80's más Underground, en la oscuridad de grupos que la ramificación de géneros apartó un tanto de la luz popular, sin embargo lo hicieron de una forma sofisticada, pasional, al igual blanda y amigable a ratos, aunque obteniendo los mismos resultados finales.

Tom Smith y los suyos saben que por esa senda que abrió In Dream hay cosas por explotar, una senda que digamos, se vieron obligados a tomar debido a la salida del guitarrista fundador Chris Urbanowicz. Si bien hoy por hoy, hay una distancia abismal entre lo que fuera su debut The Back Room a lo que es éste nuevo Violence, no podría tachársele a la banda de conformistas dentro de un estilo de guitarras que ya no es sustentable para ellos y que mucho se ha agotado en los últimos años. Los rasgos electrónicos, synths, cajas de ritmos son obvias herramientas que habrían de buscar para abrirse paso a nuevas fronteras, además una voz como la de Tom Smith con ese oscuro tenor, elegancia y tintes desgarradores, sabe que puede adaptarse a muchos subgéneros y que ése estilo, es garantía en cierto publico amante del Post-Punk. Qué mejor que ahora dinamitarlo con toques industriales, de una electrónica más sucia, Drone; el responsable: Ben Power integrante de Fuck Buttons y el hombre detrás de Blanck Mass, quien ha sido el asignado productor además de un experimentado como Leo Abrahams.

Son este par de sumas las que sin dudas sacan a flote el álbum, no es que Editors haya cambiado o acomplejado su composición, o siquiera por un momento se aprecie algo nuevo; es una nueva máscara para sus no hits de su último par de trabajos. Porque en el núcleo no son los Editors dinámicos de canciones como "Munich", "Bullets", "Bones", "Bricks And Mortar" o "A Ton Of Love", sino son más los Editors lentos pero intensos, los baladistas, al menos intentan solidificar ese lado mermado de su pasado que por lo regular sonaba cursi. Lo digo aunque la inaugural "Cold" no sea garantía de esto porque parece más algo del Coldplay de años recientes. Pero las novedades se empiezan a asomar en la nerviosa "Hallelujah (So low)", un híbrido extraño, contrastante entre su conducción acústica cruda para ascender en un loop y coros monásticos hasta volcarse en un licuado de ruido atronador.

Pero como lo dije, la producción es una máscara, así entonces los puntos son para la producción de Ben Power. Porque de repente el optimismo, estribillos alentadores como los de "Darkness at the Door" son más algo que podrían firmar las bandas de Alternativo mainstream como One Republic, Imagine Dragons, etcétera. Incluso hay momentos en que llegan a abusar de estos estribillos en "Nothingness", un corte que se construye bien entre bucles, secuencias electrónicas hasta llegar al momento de un coro que le hace honor a su nombre, porque se repite una y otra vez para decir absolutamente nada. Ya con "Counting Spooks" este sentido se reivindica, la banda nunca se precipita, va a marcha lenta pero dejando el espacio para los artilugios de su productor, es una primera mitad un tanto atmosférica donde hasta lucen las rimas en voz de Smith hasta tornarse más electrónica en una reiteración resumida de su par de frases más certeras. Al igual debe ser ya mandato divino que a este tipo de voces no se le den las baladas a piano, pienso en Martin Gore que tardó demasiado en encontrarle el punto a estas composiciones, en este caso "No Sound but the Wind" termina siendo una más para Editors a pesar de la bienintencionada letra que al parecer va dedicada a un hijo y lo que llegará a ver a este mundo cruel.

Ya para hablar de los puntos mejor logrados en esta placa, es evidente que "Magazine" como Single, al menos logró capitalizar bien un poco de todo lo que presenta el compendio, desde el lado sensible, piano, explosión dinámica con algunos cargas de estridencia que por supuesto van acorde a la narración mordaz de Smith. Por otro lado el tema homónimo, se erige por mucho como el mejor e irónicamente es el más ajeno a la linea. "Violence" suena mucho más cercana a su 3er disco, aquel que marcó el primer cambio en la banda y que dejó algunos temas de dimensiones gigantescas. Aquí, sobre un beat sinuoso y con la guía únicamente del bajeo, Tom Smith va surcando serpenteante con su voz expuesta, modulando y matizando, recargando con precisión en un amenazante estribillo para recostarse en una magnifica coda. Ese lapso final incluso, sin decir nada mantiene latente la sensación de peligro, de la marca que dejaron los minutos anteriores del mismo corte.

La nueva producción no es una nueva dirección, parece por momentos que en lugar de trabajar junto a Ben Power desde cero, más bien la banda le entregó la música para ver cómo podía él disfrazarla. Seguimos escuchando por muchos momentos a los Editors blandos, que pretenden dejar todo en responsabilidad del sentimentalismo que causa la voz de Smith, tratando de conmover y no de emocionar. Poca adrenalina, poca violencia a final de cuentas.
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46%


01. Cold
04. Darkness At The Door
05. Nothingness
07. No Sound But The Wind
08. Counting Spooks
09. Belong

Por: José Marr

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